La maquinaria para hacer vino más moderna que hay en la actualidad puede hacer que este producto llegue al mercado en las mejores condiciones, pero hay veces, que un fallo en cualquier proceso de almacenado o de transporte puede hacer que el vino se estropee. ¿Cómo podemos saber si un vino está estropeado o no?
Es importante tener en cuenta que algunos defectos que puede tener el vino solamente pueden ser detectados por enólogos o grandes apasionados del vino. En otros casos, bastará con fijarse un poco en las características del producto para saber si está bien o no.
Señales del que el vino está estropeado
Que el vino huela a corcho puede ser uno de los defectos más comunes. Esto sucede cuando el moho penetra en el corcho, lo que puede llegar a afectar a toda la bebida. Cuando servimos el vino en la copa se siente rápidamente y poco a poco se va acentuando a medida que pasan los minutos.
Si al olerlo y probarlo notamos que está avinagrado, el vino hay que desecharlo. Este producto no debería tener ni este gusto ni este olor y no es aconsejable consumirlo. Por otro lado, también puede oler a manzana descompuesta. Esto se debe a la oxidación del producto y suele pasar cuando se deja una botella a medio consumir durante unos días o cuando el proceso de fermentación no ha sido correcto.
El color puede revelar también si el vino está estropeado o no. Por ejemplo, en caso de los vinos blancos, una de las alteraciones más fuertes es cuando se torna a un color naranja. Si huele a fruta descompuesta es otra señal de que el vino no está en las mejores condiciones.